viernes, 4 de marzo de 2011

JORGE RIECHMANN: HABLAR CLAROSCURO, OSCUROCLAREADO

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En la editorial valenciana Azotes caligráficos se publicó en el 2009, a finales de año, el libro objeto Las artes de lo imposible, de Jorge Riechmann, al que pertenece la imagen con poema manuscrito de abajo.
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En la revista Kafka han publicado 4 poemas del poeta en su nº 10, aquí. Por otro lado abajo, que es arriba en realidad, del mirar, pero abajo de la imagen, al fondo, en la forma que es el contenido y contienente, uno de sus poemas. Se expone y sobre-expone Riechmann, aunque no creo que le favorezca intuyo en parte que uno respira a diario y si su texto es pre-texto para que otros no dejen de respirar, la sobreabundancia de producción no es la balsa de un ego sino ese desegotizador ejercicio de darse, de vacíarse, que también lleva a la desaparición del autor, pero de su ceniza abono vivificador posibilitará que la cosecha futura tenga un futuro no menor. Acabo de volver de Roma, donde Berlusconi divide el tiempo en inútil y suicida, y al leer a Riechmann no puedo menos que hacer en la soledad de la lectura una mueca cómplice y un ah, claro, incomodado. Ahora, desde Riechmann, entiendo mejor a Juan Carlos Mestre y su lecciones de no olvido en la Tumba de Keats...
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Sade

Drácula

Himmler:

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el costumbrismo

en la era de Berlusconi


Así las cosas, no conviene dejar de mirar donde pasa la historia, donde no queda sino abrir los ojos y aquietar el paso, aguzar el oido, leer contra el daño de los propagandistas y sumisos siervos de soberbia actitud hacia los abajados y no confundir ombligo con poema, ni mesianismo con tomar partido por las cosas, las causas y las gentes.

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Víktor Gómez

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Como si la res

pudiera permitirse bromear

con el carnicero

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Como si un ser mortal pudiera permitirse

inventar religiones

o luminosas pantallas extraplanas

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Como si uno pudiera permitirse fantasear

con robarle un naipe

precisamente su último naipe

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al Diablo

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Jorge Riechmann

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